sábado, 9 de enero de 2010

Trinidad "flamenca", según Salvador Rueda



En el diario El Liberal del 25 de junio de 1894 encontramos un artículo titulado Trinidad "flamenca", del periodista y poeta malacitano Salvador Rueda (Benaque, 1857-Málaga, 1933), reconocido precursor del Modernismo español.

El concepto bíblico le sirve al escritor para hacer la semblanza de los tres artistas del baile, toque y cante flamencos que, desde su prisma, destacan sobre las demás figuras de la época: la Macarrona en el baile, Paco el de Lucena en el toque y Antonio Chacón en el cante.

El escrito contiene uno de los textos literarios más antiguos que se ocupan de la estética flamenca de Chacón. A la sazón, el jerezano acababa de cumplir 26 primaveras.


...La tercera persona de la Santísima Trinidad es Antonio Chacón, un poco poseído él, y con razón, de que tiene un ruiseñor en la garganta. El cual ruiseñor no tiene sistema de canto conocido. Sale por donde le parece, y á veces sin saber á donde va á llegar con sus fermatas; pero como su voz, al caer en el aire, va guiada por un buen gusto instintivo, cuanto hace con ella es delicado y es fino. Así como otros cantaores han manifestado su característica de tales con una ó dos coplas peculiares, únicas de ellos, Chacón manifiesta su modo de ser, no teniendo copla predilecta.
(...) todas las celebridades del género han tenido, como si dijéramos, y usando términos literarios, su escuela; Chacón tiene la de no tenerla: así es que su canto no puede remedarse. (...) Lo que distingue el canto mudable de Chacón es el sentimiento.




El Liberal, 25 de junio de 1894

3 comentarios:

  1. Curiosa trinidad, la de Salvador Rueda: o crees en los tres o en ninguno.

    La Macarrona truhanesca y su cuerpo, todo ojos y guiños; El de Lucena, jacarandoso y todos dedos... y Chacón, maestro sin escuela.

    Me gusta la colección de adjetivos del escritor, y también su estilo animadísimo; pero parece que le entusiasma más la gitanilla y el tocaor, que el maestro cantaor.

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  2. Gracias por la aclaración sobre la fecha del texto en mi blog. La verdad es que el escrito me parece tan moderno que se me pasó por alto que estaba escrito en 1894, y que Chacón tenía 26 años.

    Tanto Chacón, como Montoya, me los imagino siempre en su edad adulta y venerable. Me cuesta pensar que fueron jóvenes alguna vez, pues su maestría los hace "acrecentarse" a mis ojos.

    También me despista que siempre se describe mejor una forma de bailar o tocar que el cante flamenco, que nadie acierta a explicar con plenitud.

    Eso me pasa por leer tan deprisa..., que parece que me falta tiempo pa' todo. :-(

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  3. Eso pasa, Porverita... también cuesta imaginarse a Matrona o Talega en sus años mozos. Con otros ocurre el fenómeno contrario: Morente acaba de cumplir 67 años :-)

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